viernes, 11 de junio de 2010

El Lancha se cree el Bocha


Lesionado, desde el lado de afuera, Federico Voltan se muere de ganas por volver a ponerse la camiseta del Marrón. Mientras tanto, mató la ansiedad con Rugby Fun hablando de todo: su club, Independiente, Giannina Maradona, el Mundial y hasta le dedicó la nota al Inglés Brinnand.
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Belgrano está a horas de jugarse su pasaje al Top 14, y él no puede estar empujando con sus compañeros dentro de la cancha. Es un tema que lo mata, porque desde que se lastimó en la Copa Buenos Aires no para de trabajar y entrenar diferenciadamente para salir a la cancha nuevamente.
Ahora su día a día cambió. En vez de pasarlo con la guinda lo pasa hablando y contando cómo está de su hernia de discos. "Al final te pasás hablando de eso y te cansás. Lo mejor sería contarle a uno y que esa persone le cuente al resto. Con la nota ya no le voy a tener que explicar a nadie más -risas-". Así que ya saben, sin perder la sonrisa, Lancha le cuenta a todos cómo esta.
¿Cómo fue la lesión?
Estoy desde el último partido de la Copa Buenos Aires, contra Hurling. Ahí salí, en la semana me hice unos estudios y me dieron que tenía dos hernias de disco y necesitaba rehabilitarlas. Ahí arrancó todo. En un momento parecía que volvía rápido o que me tenía que operar. Pero el dolor no bajaba, así que ahora estoy trabajando a full para no tener que pasar por el quirófano.
¿Y la vuelta, para cuándo?
Es lo que me preguntan todos, mis amigos, la gente del club. Pero en realidad no tengo fecha. Los médicos no me la quieren poner. Me dicen que cuando no tenga dolor voy a poder jugar. Por ahora lo siento un poco, así que tengo que tener paciencia para volver sin operarme, que sería perder toda la temporada.
¿Cómo es ver todo desde afuera?
Es muy difícil. Arrancás el año planificando lo que vas a hacer: estudiar, trabajar, entrenar y jugar. Esto es algo que demanda mucho tiempo, muchas horas en el club. Pero de repente no estás y empezás a bajonearte, a ponerte triste. Ahí valorás lo lindo que es jugar; otras veces da fiaca entrenarse y ahora me muero de ganas por estar con los chicos. Es todos los días decir "me la banco y sigo adelante", hay que llevarlo con alegría y como se pueda.
¿Hace falta psicólogo deportivo, como tienen en La Plata?
No, el psicólogo es uno mismo. Los amigos también ayudan y apoyan. Igual yo siempre digo que cuando estás lesionado lo mejor es que no te pregunten nada. Cuando llegás al club, todos te hablan de eso y quieren saber cómo estás.
Cuando no hay rugby, Lancha cambia la ovalada por la redonda, aunque no siempre es tan facil refugiarse en el fútbol. "Ahora es difícil, porque terminó el campeonato de fútbol y a Independiente no le fue tan bien. Así que la ansiedad se suma. Ahora le estoy poniendo énfasis al estudio; espero estar recibido a mitad del año que viene de Ingeniero -es un sacrificio también-. Ahora no estoy trabajando, pero si alguien lee la nota y me quiere contratar para un laburo part-time les adjunto el currículum -risas-. Estoy cursando seis materias ahora y después me faltan cinco más; ya casi estoy".
Esperando al lado de las canchas de tenis del BAC, fue imposible no verlo acercarse caminando por la entrada. ¿Porque es enorme y mide más de 1.90? ¡No, porque vino completamente producido para la entrevista! Ahí dejó ver que el Rojo es una de sus pasiones más grandes. Por eso cuando le hablan de fútbol se le iluminan los ojos.
¿Por qué viniste vestido de pies a cabeza con la camiseta, pantalones y medias de Independiente?
Cuando me llamaste pensé "seguro me va a sacar una foto" -risas-. Cada tanto me gusta venir vestido así al club. Yo siempre digo que se puede usar ropa de rugby para jugar al fútbol, pero no al revés, porque se rompe toda. Pero ahora que estoy lesionado y no entreno con contacto, puedo ponérmela y sentirme orgulloso de ser un hincha más del Rojo entre los muchos que somos acá en Belgrano. Acá somos una banda muy importante; el Oso Galli, el tipo del bar, el del gimnasio. Vamos bastante a la cancha, incluso antes íbamos con Joaco Brinnand, Chaqueto Campero y algunos del CASI que también se prendían. Acá se siente mucho el Rojo, y cuando pierde nadie habla, sino el Oso los acomoda y se pudre todo -risas-.
Ahora se viene el Mundial, que te va a servir para aplacar un poco la ansiedad de no poder jugar al rugby. ¿Cómo ves a Argentina?
Bárbaro, me encanta Maradona de técnico. A Diego lo banco a muerte, para mí es un maestro. Cuando vos querés a alguien siempre lo entendés a pesar de que se equivoque. A mí me pasa eso con Diego, siempre lo quise. Para mí es un genio, fijate que su ídolo era Bochini. Él tiene que estar ahí, es el número uno del mundo y ama la camiseta. Yo creo que salimos campeones en serio. Hablando con Walter Safarian -algunos de los chicos del club son amigos- nos dimos cuenta de que pensamos lo mismo. Incluso banco el tema de Garcé; si Diego piensa que tiene que estar, yo lo banco. Él ve algo que nosotros no vemos -risas-.
¿Tiene que jugar de titular el Kun Agüero?
Hoy en día lo veo como suplente, pero como el mejor suplente del mundo. Teniendo adelante a Messi, Higuain, Milito y Tevez es difícil. Pero ser suplente a los 22 años no tiene nada de malo. Por ahí entra y te cambia un partido. Los que dicen que va porque el suegro es Maradona, es la pavada más grande que hay. ¡Mirá las cosas que hace en el Atlético!
¿Le envidiás a la mujer?
Ehhhhhhh -risas-, ¡la verdad es que no! Le envidio toda su vida, menos la mujer -risas-.
¿Un futbolista que pudieses traer a Belgrano?
El Morrón Rotchen, porque es bien aguerrido. Si me voy muy lejos en el tiempo, entonces elijo a Tuzzio, que es un guerrero; deja la vida en la cancha. Eso es lo más importante. Después si tenés talento, sos el número uno. Lo ponemos de ala, batallador. Juega hasta con el hombro mal, el tipo es así, juega hasta lesionado. También me llevo a Nacho Piatti; lo meto de apertura, que maneje los hilos, una pisadita por ahí, que sea el estratega.
¿Te gusta Daniel Garnero o preferías que siga el Tolo Gallego como entrenador de Independiente?
El Tolo es un genio, pero acá en el club me dijeron una frase muy cierta: "el Rojo es más grande que el Gallego". Eso es verdad, así que a él lo seguimos queriendo, pero necesitábamos un cambio. Garnero es una excelente persona, y con trabajo vamos a salir adelante. Ojalá que salgamos campeones pronto, ¡porque es más la ansiedad por dar la vuelta que por volver a jugar! -risas-. Además, si Independiente sale campeón se alegra el Oso Galli y vuelve a dar notas. Los periodistas van a estar contentos, es un bien para la comunidad y el mundo si salimos campeones.
¿Cómo cerramos la nota?
Quiero destacar que al Inglés lo tenemos muy presente acá en Belgrano. Era muy querido y tenía amigos por todos lados. Yo iba a la facu con él, no lo veía siempre, pero cada vez que nos juntábamos era muy lindo. Se siente, era una persona que dejaba una huella. Y también quiero dedicarle la nota al Tata Vergara, que se lesionó y no puede jugar por el resto del año. Estamos todos mandándole fuerza, es un baluarte para el plantel como persona y muy importante para el equipo.

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