Belgrano doblegó a Pucará en Burzaco, por 48 a 17, en un partido donde el juego combinado y compacto del Marrón fue mucho para una defensa roja que no supo frenar los embates del ganador. La figura fue Santiago González, con 28 puntos. |
En la tarde de domingo, a pleno sol y un ambiente agradable, se veían las caras dos equipos que por historia y resultados en la temporada pasada, traían sobre sus espaldas la chapa de candidatos. Con arbitraje de Gustavo Basilio y la ovalada en el aire dio inicio al torneo. Ambos ya dejaban trascender sus estrategias: Pucará, por un lado, mostró un mix de líneas, con la clara intención de integrar si juego y darle dinamismo a los ataques, además abrió la pelota desplegando la cancha, dando continuidad; Belgrano, por el otro lado, propuso un juego compacto, primero de delanteros y luego de backs, con la clara intención de abrir la pelota, pero llegando a la zona de contacto con potencia y luego desplegaba; mantuvo la pelota viva y el apoyo fue fundamental. El partido era parejo, pero Belgrano era quien con los ataques lastimaba más. Y gracias a la potencia y tamaño del pack, podía vulnerar la defensa del rojo, luego la tercera línea con los backs armaban el ataque dinámico que tuvo como premio dos tries convertidos. El rojo no caía, seguía intentando buscar espacios, pero su defensa no era estable y el marrón lo lastimaba cada vez que pisaba el acelerador. Pero el juego vistoso del rojo, sumado a la velocidad de sus backs, le dieron su primer try, de la mano del juego combinado. Pero dos minutos más tarde, Belgrano volvió a desnudar la fragilidad defensiva de Pucará y volvió a marcar de a 5. Así y todo, el rojo fue a la carga, y a pura velocidad y dinamismo llegó a marcar una nueva conquista que lo acercó un poco en el marcador, que paso a ser de 17 a 30. Pero los frutos que cosechó Belgrano, luego de desgastar al rival con rigor físico, dio resultado. A los 17 minutos, llegaría un nuevo try del marrón en una jugada donde los jugadores visitantes apoyaban al portador de la pelota, manteniendo el juego vivo. Pucará ya estaba lejos en la chapa, y por cómo se estaba dando el partido, se podía vaticinar la derrota. Así y todo, nunca bajo los brazos y siempre buscó atacar. Pero Belgrano era más, tenía resto físico y el juego desplegado estuvo a la altura. Así vendrían dos tries más para poner cifras definitivas de 17 a 48. Pucará (17): Ignacio Franck; Tomás Bertoia, Eusebio Martín, Tomás Mitchel y Jerónimo Varela; Jorge Allende y Simón Bóveda; Juan Ignacio De Grazia, Matías Haurigot (cap) y Lucas Leeuwarden; Bautista Bottone y Santiago Blas; Agustín Barosio, Jeremías Desarro y Joaquín Girado. Entrenadores: Gabriel Amleida y Juan Martín Coscio. Cambios: PT 12', Iñaki Del Gesso por Allende. ST 7', Ignacio Tognola por Leeuwarden; 14', Matías Bustos por Martín, y 16', Lucas Mesano por Blas. Belgrano (48): Santiago González; Agustín Posse, Tobías Venditti, Juan Cruz Rodríguez y Matías Recca; Martín Arana y Franco Sasso; Tobías Sangiacomo, Gabriel Raizman (cap) y Sean Adam Smith; Agustín Menéndez y Tobías Durañona; Franco García Aromando, Rodrigo Lòpez Avetrani y Lisando García Dragui. Entrenador: Fernando Spitarelli. Cambios: ST 4', Nicolás Argonz por Sangiacomo; 11', Marcos Güemes por Sasso; 21', Agustín Lastorio por García Aromando , y 25', Mateo Di Franco por Smith y Agustín Vaccaro por Posse. Tantos en el Primer Tiempo: 3', Penal de González (B); 17 y 27', Goles de González por Tries del mismo y de Arana (B), y 35', Try de Desarro (P). Amonestado: 30' Garcia Dragui (B). Resultado Parcial: Pucará 5 – Belgrano 17. Tantos en el Segundo Tiempo: 3', Try de Haurigot (P); 5, 19, 25 y 32', Goles de González por Tries de García Dragui -2-, Rodríguez y del mismo (B); 11', Penal de González (B), y 16', Gol de Del Gesso por Try de Girado (P). Cancha: Club Pucará. Árbitro: Gustavo Basilio. La Figura: Santiago González. El fullback de Belgrano tuvo una tarde de alto vuelo porque además de tener una eficacia del 100% en envíos a los palos, marcó dos tries, totalizando 28 puntos. Se mostró siempre como una opción de ataque, recostado sobre los extremos y cada vez que se propuso a atacar, vulneró la defensa de Pucará.
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