El próximo domingo a las 15.40 hs en La Plata disputaremos la semifinal del Top 14 con Hindú. Este año ya nos enfrentamos por la semifinal del Nacional de Clubes y caímos por 39 a 30 en Don Torcuato y en la última fecha del Top 14 también nos vencieron 29 a 28, resultado que alcanzó para que Hindú pasara directamente a la semifinal y nosotros tuviéramos que jugar los cuartos de final con Atlético de Rosario.
Justamente el partido del sábado pasado en La Plata no fue de los mejores del año del Marrón, por no decir que creo que fue el peor del año lejos. Pero no es cuestión de caerle al equipo y criticarlo severamente por esa actuación, yo estoy convencido que influyeron cuestiones de peso para jugar de la manera en que se jugó. En primer lugar creo que pesó mucho en el equipo el hecho de haberse quedado afuera de las semifinales directo por tan poco y que por ello se llegó al partido con Plaza como "banca" y con la carga y responsabilidad de tener que ganar si o si en función de lo realizado durante el año, no tengo dudas que para los jugadores y el plantel en general hubiera significado un golpe deportivo tremendo el no acceder a las semifinales por perder con los Rosarinos. En segundo lugar el hecho de jugar casi todo el partido con luz artificial y con rocío que convirtió a la pelota en ingobernable jugó un papel fundamental (es cierto que para ambos equipos), pero la realidad es que los clubes de la URBA no están acostumbrados a jugar en esas condiciones y ello se notó claramente en el desarrollo del encuentro. Creo que la Unión deberá analizar seriamente no volver a cometer esta desprolijidad que va contra el buen desarrollo del juego y fundamentalmente desluce el final de un gran campeonato que no se merece una definición con estos inconvenientes que resultaron evidentes y que puso a ambos equipos en situación incómoda de juego.
Ser "banca" seguramente jugó en la cabeza de los jugadores y esa presión se notó muchísimo en la cancha en donde Belgrano entró totalmente atado y duro, eso se vio reflejado rápidamente en la manera en que Plaza con dos pelotas en 15 minutos nos embocó dos tries. A partir de ese momento por suerte el Marrón se serenó y comenzó a trabajar el partido y le fue cerrando el camino a los Rosarinos que no volvieron a marcar puntos ni a inquietar, sin embargo fuimos nosotros los que no supimos resolver el dominio que tuvimos en las formaciones fijas y transformar eso en puntos. Por otra parte se notó mucho el parate de mas de dos meses que tuvo Pancho con falta de rugby, pero por suerte ya con este partido seguramente estará nuevamente en sintonía y se convertirá en el gran conductor que tuvo Belgrano este año, siendo por lejos el mejor jugador del equipo desde mi punto de vista.
Párrafo aparte merece Pablo De Luca (h), referee del encuentro con Plaza, a mi no me gusta meterme con los referatos pero la verdad que lo del sábado fue impresentable desde todo punto de vista y esta opinión es exclusivamente mía y nada tiene que ver el Club con esto. No se puede poner a dirigir las instancias finales de un torneo de este tipo a un referee novato y sin experiencia para partidos con esta carga emotiva y deportiva y en donde hasta los más mínimos detalles pueden echar por tierra el trabajo de todo un año. Dirigió pésimo para ambos lados, siendo Belgrano el más perjudicado por el simple hecho de haber tenido mas la pelota, jamás se preocupó por la marca en off side fuera de las formaciones, con lo cual estando la pelota húmeda y además con la marca encima se hacía imposible jugar; penalizó cualquier situación en los rucks en donde los jugadores buscaban limpiar la formación y la pelota, ello fue claramente lo que sucedió en el minuto 77 cuando Pedro Bugiani lícitamente desplazó a un jugador de Plaza que obstaculizaba la salida de la pelota y le impedía a Pancho jugar rápidamente. Ese penal en mitad de cancha de haber sido convertido por Rodriguez Gurruchaga hubiera significado la eliminación de Belgrano, por suerte se quedó corto en la patada, sin embargo tuvimos que jugar hasta el minuto 7 del primer tiempo reglamentario con 14 jugadores. Tan indescifrable fue el referato que hasta el Oso Galli a quien no se le puede decir que no tenga experiencia (324 PJ en 18 temporadas y 147 tries) optó por levantarse en un scrum 5 apenas arrancó el segundo tiempo ya que si bien el fijo estaba avanzando ya tenía 2 jugadores de Plaza encima y nada se cobraba, con lo cual viéndolo por TV se nota claramente porque el Gordo levantó la pelota, era claro que De Luca podía cobrar cualquier cosa y de esa manera perder una situación inmejorable de try.
En definitiva, a pesar de todos los inconvenientes, logramos pasar de ronda y sacarnos el peso de ser "favoritos" y ahora jugar mano a mano con Hindú por el pase a la final.
No tengo ninguna duda que Belgrano está listo y perfectamente maduro para vencer a Hindú y que lo va a hacer. Ya tenemos la experiencia de jugar 3 partidos decisivos con los de Don Torcuato en donde se nos escapó el triunfo por poco: la semifinal del año pasado 18 a 16; la semifinal del Nacional de Clubes de este año 39 a 30 y la última fecha del Top 14 que caímos 29 a 28. Los de Don Torcuato saben perfectamente que el Marrón es un hueso duro de roer y nosotros ya tenemos claro como jugarle y golpearlos donde mas les duele. Seguramente será un partidazo en donde Belgrano deberá entrar concentrado desde el minuto 1 y dedicarse a desarrollar el juego que mas le conviene para lastimar a Hindú y doblegarlo finalmente en una instancia decisiva. La final nos espera y esta vez así será.
Magaña
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